viernes, 25 de noviembre de 2011

Freja Beha Erichsen

Danesa. Roskilde.

Nacida en el 87.

Ojito derecho de Karl. Ambigua, guapa, dulce, genial, borde? ELLA.

Y anda en pasarela como los Dioses.










domingo, 13 de noviembre de 2011

Victoria's Secret show Parte 1

Llegó la hora, llegó el momento de las chicas que vienen a vendernos sueños.

 Llegaron a ese desfile rosa, chicle, de sonrisas, de perfección, de sueños. Las llaman Ángeles, y creedme que lo parecen, recién llegadas a la Tierra desde el mismísimo cielo.

 Adriana Lima


 Adriana Lima


 Adriana Lima


 Alessandra Ambrosio


 Alessandra Ambrosio


 Anja Rubik


 Constance Jablonski


 Alessandra Ambrosio


 Karlie Kloss


 Karlie Kloss


 Lais Ribeiro


 Lais Ribeiro


 Maryna Linchuk


 Maryna Linchuk


 Miranda Kerr









Y ahora, el espectáculo debe continuar

jueves, 13 de octubre de 2011

Provocador hasta el final. Salió de su tierra para volver muchos años después a cerrar el círculo... Buscó la MUJER, el sexo, su particular concepto del amor, blanco y negro, fotografía, sexo de nuevo y las mismísimas puertas del cielo, June Browne. Él, Helmut







sábado, 8 de octubre de 2011






Mi mente era un caos a la que no paraban de llegar ideas, a todas horas, en todo momento. Caos y orden. A eso se le suma el valor de la belleza...

Por eso lo del urbanismo. Por eso lo de la moda.

viernes, 7 de octubre de 2011


Cada persona tiene su propio concepto de la felicidad. Estar en pareja, tener hijos... Estar y vivir siempre soltero, que no sólo. Viajar o no viajar, gastar el dinero en esto o en aquello. Formas de vida. Simplemente.

Ni mejor ni peor, simplemente cada uno elige la suya. Lo importante es estar conforme con la opción que escojas, que elijas lo que elijas estés satisfecho. Eso se advierte en la alegría o amargura que desprendes. Satisfacción o insatisfacción.

En la moda sucede algo parecido a la vida. No hay nada que sea lo mejor o lo peor. Al final da igual lo que te recomienden, lo que te vendan. Si eres lo suficientemente sabio, sabrás que en la vida existe la posibilidad de elegir, y espero que no seas tan cerril como para pensar que sólo hay una opción válida o buena. En la moda no existe una moda. Cada uno elige lo que le va, le gusta, lo que le parece genial.

Y aquí, lo que en la vida era una sonrisa o amargura, se traduce en actitud. Si llevas lo que has elegido y estas conforme con ello, vas con actitud.

Caminas unos centímetros por encima de ras de suelo, el viento aligera tu pelo y el mundo rota sobre si mismo pensando en ti. Porque eres TÚ. Has elegido y suceda lo que suceda fuera, tu estás bien. Eso es todo. Eso es vivir. Como la vida misma.






*En la primera imagen, maravilloso vestido de Elie Saab. En la segunda Adriana.

domingo, 2 de octubre de 2011

El mundo sigue.



El mundo sigue girando, pase lo que pase, te caigas al retorcerse el pie o salgas con la luz estelar de las personas especiales.

No importa lo que hagas o lo que lleves dentro, debes seguir caminando. Tu ropa es tu máscara, tus tacones son tu alza, tu cara es el gesto. Y ahí está todo, de eso depende lo que tienes, lo que eres.

Ayer se cerró el círculo. Estaba asustada, no sabía que me esperaba, que se me vendría encima. Lo admito: tenía miedo.

Y es que además la vida nunca suele jugar a mi favor, o por lo menos yo soy muy pesimista y encima de que no veo las oportunidades cuando las tengo delante, antes de que lleguen no tengo muchas esperanzas sobre ellas. Pero llegó.

Cada jugador se puso en una parte del ring, las cartas estaban sobre la mesa, los dados habían sido echados. Ya daba igual todo, era lo que había ahí. No había lugar a la improvisación ni a la mejora. Vieras lo que vieras enfrente tuy, tendrías que jugar con lo que llevabas, con lo que había, no podías ir y cambiarte, no podías cambiar el lugar ni los gestos con los demás, no podías cambiar tu actitud. Tan sólo actuar, pensar rápido, actuar despacio, sin que se note la premeditación si la hubiera, cuando las cosas peor van es cuando hay que sacar ALGO, si lo hay.

Yo esto lo tenía claro y había dejado el resto en manos de la suerte.

Yo siempre pienso en eso de amor-motor. Sí, el amor como un motor. Y empiezo a pensar que la moda es actitud. Moda-actitud. Te la da, te la quita, pero al final, o mejor dicho, al principio, eres tú el que la crea, y el que la lleva.

Y el mundo sigue girando, y tú eres quien anda sobre él.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Renovarse

Los ciclos van cerrándose continuamente. Un día eres lo más, pero eso no puede durar eternamente, sería antinatura, entonces bajas.

La vida es como una noria y para volver arriba, al lugar de los inalcanzables tienes que renovarte, volverte algo nuevo y diferente a lo ya visto, algo de lo que no haya más, que sea original, que no lo veas en todas partes.

La gente el primer día tque te conoce puede sentir admiración, por lo menos si eres simpático, extrovertido y accesible, si muestras ese algo especial e innato que algunas personas tienen (o tenemos), pero cuando te hayan tratado varias veces se adecuarán a ti.

Simplemente sucede. Si en la pasaresa pusieran mujeres normales, no nos interesaría.

Porque lo que nos interesa es lo diferente, lo que deseamos pero no podemos alcanzar.

Todos queremos ser guays y sobre todo, estar a su lado, pero la vida, como buena noria, también manda a éstos abajo, y entonces, no queda otra que "renovarse o morir"

Eso, o quedarse atrás.
Tampoco debe ser tan malo, es sólo un cambio de vida. En tu mano está si quieres aceptarlo, o no.

viernes, 23 de septiembre de 2011

domingo, 18 de septiembre de 2011


Reinventarse. Ese es el gran secreto. No de la vida, que de esa hay otros, o quizá ninguno. Yo me refiero a que reinventarse es el secreto para seguir ahí, para ser mirado, analizado, o mejor dicho, admirado. Y en contraposición (como diría la gran Gabrielle: "Viví mi vida teniendo por sentado que todo lo que no me gustaba tendría un contrario, algo que si me gustara") para ser odiado y envidiado.

Que hablen de ti, bien o mal. Pero que estés ahí. Reinventarse, ser mirado, ¿y todo para qué? Por la autoestima. Ya está. Tacones de 10cms. Mínimo. Pero unos buenos zapatos, al menos bonitos, ya sabes...

Si tienes algo que los demás quieren, los demás pensarán en ti, porque tienes ese algo con lo que ellos sueñan. Aunque sea el áurea.


En la imagen la gran Mariacarla Boscono. Quien puede ser muchas, quien tiene áurea. Quien es genial. De las mejores. Pero sobre todo, es ella.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Desnudez


¿Sabéis qué? Yo también tengo miedo. A pocas cosas, pero lo tengo. Creo que es algo que nunca he dicho en voz alta. Pero ya está bien. Llegó el momento de decirlo: tengo miedo.


Le tengo miedo aún hoy a una persona que hizo muy desgraciada mi adolescencia. Tengo miedo a que vuelva y vuelva a dejarme sola, aunque sé que eso no es real. O mejor dicho, no es posible. Sí, tengo miedo, mucho miedo. Ahí conocí la soledad, me sale decir que también el Infierno, pero no me suena bien y yo no soy una poeta maldita... Casi nunca hablo de esta persona, pero pienso a menudo en ella. Me parece ahora que lo pienso un poco horroroso, tener tanto miedo a algo y no poder sacarlo. En realidad, no creo que vuelva a hablar de esta persona, y menos en el blog, simplemente es necesario ahora hablar del principio (ella) para llegar al final (la creación de este blog).
No voy  a ser absurda, no voy a relatar lo sucedido, no tiene sentido, y además después de tantos años de duro trabajo por suerte mi mente ha borrado la mayoría de las cosas.


Es extraño. Han pasado muchos años y mi vida ha cambiado mucho, YO la he cambiado. Soy de ciencias, así que mi mente lo cuantifica todo. No he dicho que necesite cuantificarlo, sino que simplemente lo hace. Y ésto no iba a ser menos. Digamos que de un 100 %, que sería el máximo, de esa vida en la que estaba presente aquella persona, lo que queda sería un 40 %, a lo sumo, como máximo. El otro 60 % es mi nueva vida. Surgida paralelamente a su salida de mi vida.


En mis peores pesadillas, cuando pienso que podría volver, me da miedo que me lo arrebate todo, el pánico me hace obligar que eso es IMPOSIBLE, que yo tengo  MI VIDA más allá, lo que yo he creado. Si eso llegara a suceder yo tendría que cobijarme o unirme más a esas-otras-cosas,-esa-otra-vida.


Y bien, esto es lo especial, es lo que quería decir, lo que quería escribir: esa otra vida SOY YO. Yo me hice a mi misma y es lo que soy. No me agarro a ello pero es mi disfraz: lo que me forma, lo que me crea, lo que soy. Mis amigos, mis hábitos, mi ciudad, mi carrera, el bar del desayuno con * los jueves, mi YO. Por eso existe la moda. Y por eso creo este blog.


Sé que es difícil de entender, que nadie en este momento (me sorprendería la extrema empatía de esa persona...) podrá entenderlo.


Sí señores. Lo que soy son mis gafas Ray Ban rojas, con las que me siento segura; ir cada día 18 (o alrededores) a por la Vogue, el estuche Roxy; mis combinaciones, ésas de "o me tiran piedras o creo estilo"; la actitud con la que salgo con la minifalda azul marina; los libros que he comprado hasta ahora y la manía de ponerles fecha y el lugar de compra. Lo que soy es ese sueño de vivir NY, y saber que me entallaré un Chanel; comerme un bocadilla con el litro cerveza en el mejor parque de M***** y visitar el mejor restaurante de esa misma ciudad.

Y es lo que soy porque necesito refugiarme en ello. Porque la moda no es ese vestido, ni ese diseñador: es lo que sientes, es que ese vestido y ese diseñador adermás de tu cuerpo cubra lo de dentro, tu alma, tus sentimientos, tu pánico, tu dios: lo que ERES. Es que llegue hasta ese punto y lo llene.

Y ese llenado se traduce en ¿seguridad? ¿actitud? No lo sé. Se traduce en ti.

No lo sé. Quizá no sea para tanto. Pero las personas que hemos sufrido mucho necesitamos reinventarnos, hacernos a nosotros mismos. A mí me ha costado más de 6 años comprenderlo, sufrirlo (porque algunas cosas hay que sufrirlas, y da igual lo que hagamos: hasta que el dolor no cese no acabará), asumirlo, mirarme al espejo, y tirar hacia adelante; después de haber aprendido esa lección, que sí, que hay que hacerse a uno mismo. Por eso yo necesito de mis gafas rojas y pensar en McQueen, para no olvidar quien soy, para ser, para diferenciarme.

Diferenciarme de lo que fui, para que si mis pesadillas se hacen realidad, sepa ver la diferencia entre esas dos mujeres: la que fui y la que soy.


Y por eso creo este blog, para leerlo y releerlo una y otra vez, para no olvidar, para cuando no sea sufficiente con mirarme al espejo. Y para seguir creciendo, para seguir siendo, para reflejarlo aquí, porque los pasitos se dan cuando se pisa al suelo, cuando después del vuelo en el aire sientes la dureza del asfalto.

Y ya está,, esto es todo. Sé que no era necesaria una explicación e idea del blog, pero ahí están, enlazados.
Tenía insomnio, hoy no podía dormir, pesadillas. No serán las últimas. Pero si es éste, el principio.